martes, 19 de octubre de 2010

Vencedor por los campos de España


Vivencias de un sportinguista, por Newxixon.

Primera parada ATOCHA.

Voy a comenzar ésta nueva sección hablando de un campo mítico en nuestro fútbol, Atocha. Muchos Sportinguistas no lo conoceréis por juventud ó por no haber acudido a él, pero siempre fue un campo especial. Sí, Atocha, el viejo campo de Atocha, donde jugaba la Real Sociedad.
!Qué decir de Atocha!. Cuando llegabas a sus aledaños, te decías: “¡vaya gradas más pequeñas!”. Aquello parecía más una nave industrial, que un campo de fútbol y por dentro, por dentro un futbolín en el sentido más amplio de la palabra futbolín.

Al entrar al campo, lo primero que te impresionaba, era lo cerca que se encontraban las gradas del terreno de juego. Podías tocar a los jugadores en los saques de banda y en los saques de esquina sin problemas. Imaginaros la presión que se hacía sobre los jueces de línea .Me río yo ahora con las áreas técnicas de los banquillos.En Atocha era materialmente imposible que se pusiera un área técnica de las que hay ahora, porque no había sitio para ello.
La afición visitante nos situábamos en el fondo norte, detrás de la portería. Estábamos todos de pie , como sardinas en lata. En ese fondo había sólo 4 escalones, no había más y apenas acertabas a ver lo que ocurría en el campo. Entre que estábamos todos apelotonados y la valla delante, que te restaba visión, no se veía nada y eso con suerte de que no te tocara una columna, porque en Atocha había columnas que sujetaban las gradas. Si te tocaba detrás de la columna, entonces lo llevabas claro, a parte de ver mal,podías acabar con tortículis de mover la cabeza para un lado y para otro de la columna.

La verdad que era un campo típico inglés y al ser tan pequeño y estar tan encima del campo, había una presión bestial. Deciros que al ir al servicio alucinabas, aquello era una odisea .Sólo había un servicio para dos personas, separados por una pared y la cola era bestial. Fijaros que cola habría, que había gente que por no esperar, orinaba en las paredes del estadio, porque aquellos servicios eran tercer mundistas. El Molinón era un campo 5 estrellas comparado con el viejo Atocha.

Dos veces acudí a ver al Sporting a Atocha. La primera vez que acudí a Atocha fue en la temporada 91/92, concretamente el 1 de diciembre del 91.El resultado de aquel partido fue Real Sociedad 0 Sporting 0.Como memoria de aquel partido el árbitro fue: Henández Velázquez.
El Sporting formó aquel partido con: Emilio; Arturo, Luis Sierra, Abelardo, Tati; Alcázar, Joaquín, Iordanov, Nilsson; Juanele y Monchu. Nuestro entrenador era Ciriaco Cano y por la Real Sociedad jugaban nombres tan ilustres como: Górriz, Larrañaga, Gajate, Carlos Xavier y Océano, todos ellos entrenados por el no menos mítico John Benjamin Toshack, también conocido por J. B.Por cierto la entrada al partido costó: 1500pts.

Deciros que en aquel partido no tiramos ni una vez a puerta. ¿Os recuerda algo ahora, que tanto criticáis en el foro? Pues antes también pasaban cosas de éstas. Creo recordar que la Real Sociedad tiró tres veces a los palos y dos al larguero. Imaginaros que a la quinta vez que tiraron al palo en vez de cantar Sporting, Sporting, cantábamos : “Larguero, larguero, larguero” y luego: “palo, palo, palo”. Emilio Isierte, que era el portero en aquel encuentro, luego ya se reía con los cánticos.
Como anécdota de aquel viaje, deciros que viajábamos en dos furgonetas de dos amigos y que íbamos 7 personas en cada furgoneta. El partido se jugó de domingo por la tarde y nos fuimos el sábado a disfrutar de la noche de Donistia.

La verdad que la gente de San Sebastián alucinó con 14 energúmenos, ataviados con ropas Sportinguistas, dando voces de apoyo al Sporting por todo el casco viejo de San Sebastián. Se nos juntaron dos chicos de Gijón que estaban haciendo la mili en San Sebastián y que alucinaban con el escándalo que montábamos por la calle y en los bares.
Hubo algún conato con algún Abertxale, pero que no fue a mayores. Yo creo que también,la gente de San Sebastián alucinaba con nosotros, ya que éramos los únicos sportinguistas por la calle,pero dábamos bastante la nota. Por cierto,todos nos decían que tenían un gran odio a los de Bilbao.
Lo que más nos sorprendió fué que a partir de las 2:30 de la mañana, todo cerrado. Si querías ir a algún sitio con marcha después de las 2:30 de la mañana, tenía que ser una discoteca.
Para dormir dormimos en el Hotel María Cristina, bueno, a la puerta del hotel María Cristina. Por si alguno no lo sabéis, el hotel María Cristina es el más importante de San Sebastián. Es en el que se alojan todas las celebritis que van al festival de cine de San Sebastián. Allí, a las puertas del hotel más caro y lujoso de Donostia, dormieron 14 Sportinguistas repartidos en dos furgonetas.

Yo cuando desperté ,lo primero que ví , fue a alguien asomado por la ventanilla de la furgoneta. Era la cabeza de un barrendero de San Sebastián, que estaba barriendo la calle y se paró alucinado sobre las dos furgonetas, para ver la cantidad de gente que había durmiendo dentro, porque no podía creer que hubiera tanta gente.De repente empezamos a oir voces en la calle. Las voces eran de un compañero nuestro que a viva voz gritaba: “sinvergüenzas, ladronnes, no entréis ahí.”
El pobre se había levantado el primero y como todos dormíamos y se encontraba con ganas de desayunar , salió de la furgoneta y entró a desayunar en el primer sitio que vio.Al estar enfrente del hotel María Cristina, entró en la cafetería del hotel y tomó un zumo de naranja, un croissant y un café con leche, pero cuándo le pidieron 1000 de las antiguas pesetas del año 91 por lo que había consumido, entró en cólera.

Luego nos contó, que gracias al escándalo que había montado, le dijeron que le cobraban 800 pesetas y que le invitaban al zumo. Pero él sólo sabía decir: “Ahí con dos cojjones , un café y un croissant 800 pesetas”. El pobre estaba indignado.Pero sí San Sebastián es una de las ciudades más caras de España.
A la temporada siguiente, viendo que algún día íbamos a tener una desgracia por esas carreteras de dios, nos juntamos todos los amigos que íbamos en furgonetas a los desplazamientos y decidimos fundar una peña sportinguista, sobre todo para que nos llevara un conductor y así poder beber a nuestras anchas y no tener que conducir después.

Dicho y hecho, fundamos la peña sportinguista Baruyu en el año 92 y por avatares del destino,el calendario de liga fue caprichoso y nos deparó un Real Sociedad-Sporting, en la segunda jornada de liga. Pues nada, una escusa muy buena para proponer el primer desplazamiento de la nueva peña a San Sebastián ,a recordar viejos tiempos en Atocha. Era la temporada 92/93.El resultado de aquel partido fue Real Sociedad 1 Sporting 2. El árbitro del partido fue: Marín López.
El Sporting formó en aquel partido con: Ablanedo; Arturo, Abelardo, Muñiz, Emilio; Pablo, Oscar, Iordanov, Iván Iglesias, Nilsson y Hugo Darío Scotto. Los goles del Sporting fueron marcados por Hugo Darío Scotto y Emilio y por la Real Sociedad Océano.La entrada de éste partido costó 1700pts. Como anécdota comentaros que cada vez que metía un gol en Atocha el equipo contrario se tiraba un volador y si el gol lo metía el equipo local se tiraban dos seguidos, creo que se hacía para avisar a las gentes de la mar que estaban pescando.

El partido se disputó de sábado y viajamos en el día. La anécdota de aquel viaje, fue, aparte de la alegría de ganar, lo que ocurrió a la salida. Salimos los últimos del campo y se nos acercaron unos chicos que nos dijeron que eran de la peña Imaz y que tuviéramos cuidado que nos estaban esperando los de la peña Mújika. Nosotros, que habíamos ganado el partido y estábamos más gallos que un ocho, no les dimos ninguna importancia a los comentarios. Cuándo íbamos andando hacia el autobús, ya vimos que había bastante gente en un alto a la espera, pero nosotros para adelante. Éramos 50 personas todas juntas de fiesta, peña nueva, ganamos el partido, quién nos iba a parar a nosotros.

Antes de llegar a su altura, deciros que en mi vida vi llover del cielo tantas piedras. Me río yo de las pedradas de Palestina, madre mía. Al lado de Atocha se encontraba la estación de tren y se habían surtido de infinidad de piedras de la vía del tren. La gente huyó despavorida, unos se metieron debajo de los coches, los que les dio tiempo se metieron en la estación, otros corrieron para atrás,otros se metieron por portales, yo y otros dos nos metimos en un fotomatón que había delante de la estación, cerramos la cortinilla para protegernos y dijimos que sea lo que dios quiera.
Había una señora que estaba esperando en la calle con una maleta por un taxi, pues hechó a correr como alma que lleva el diablo y dejó allí plantada a la maleta. Había un silencio sepulcral cuando antes sólo había cánticos. Lo único que se oía, era el sonido de las piedras golpeando contra coches, lunas,portales, vamos bestial.

La gente de la estación llamaron a la Ertxantxa, pero la Ertxantxa ni apareció por allí , para qué. Eso sí, en cuánto llamaron a la policía nacional se presentaron allí dos Patrol blindados llenos de antidisturbios en su interior, entonces nunca se me olvidrá, sale un policía gritando:”¿Dónde están esos Abertxales de las narices?,que les tenemos unas ganas"... Entonces le dice un compañero mío,”Vale Jerónimo, no sé a quién váis a pillar ahora ya, con lo que tardáis en venir, lo más cerca están ya en Francia”.Nos dijeron que todos los fines de semana tenían que intervenir por la violencia callejera y que ya estaban acostumbrados.
Por suerte, entre los 50 que fuimos no hubo ninguno contusionado, eso sí hubo algunos ataques de nervios, ya que también venía alguna persona mayor que se había apuntado al viaje de nuestra peña e incluso niños. Luego de vernos protegidos por la policía, ahí sí que cantamos, sobre todo para calmar los nervios, pero ahí no acabó todo.
Para el viaje de ida fuimos en un autocar con un conductor y para la vuelta nos traía otro autocar con otro conductor, vamos un cachondeo.
Pues nosotros cantando por San Sebastián protegidos por la policía y el autocar no aparecía. Nosotros de paseo por todo San Sebastián y el autobús que nos debería llevar de vuelta que no llegaba. La gente de San Sebastián en las ventanas alucinando con 50 sportinguistas cantando con rabia y escoltados por toda la policía de San Sebastián. De repente, apereció el conductor que nos pregunta: “Oye, ¿ Sois vosotros a los que tengo que llevar a Gijón?,llevo buscándobos dos horas”.El pobre hombre no salía de su asombro al vernos escoltados por tanta policía.
Bueno ya más calmada la cosa salimos escoltados por la policía de San Sebastián más allá de la 1:00 de la mañana. Pero al volver,el conductor, que no era asturiano, al llegar al Berrón ,vio la señal que le indicaba Gijón y se dirigió en esa dirección. Todo el autobús dormía, pero de repente el autobús empezó a moverse a un lado y a otro,dando bandazos.
Todo el mundo iba durmiendo,pero tanto se movía aquello de lado a lado que todos despertamos sobresaltados y no era otra cosa que el conductor siguió las indicaciones hacia Gijón,pero por el alto la madera.
Deciros que llegamos a Gijón entre pitos y flautas a las 8:30 de la mañana del domingo y salimos con destino San Sebastián el sábado a las 7:00 de la mañana. Vamos,una odisea de viaje. Lo mejor los tres puntinos y haber disfrutado de un campo mítico de nuestra liga y que quedó en el recuerdo ya que fue demolido en el año 93.Aunque a día de hoy, las gentes de San Sebastián, siguen añorando el mítico Atocha, donde llegaron a celebrar dos campeonatos de liga.

Satrústegi se despide de Atocha

1 comentario:

  1. Genial

    Mítico Atocha, yo sólo lo vi por la tele. Las gradas estaban tan encima que no se veían las esquinas dl campo.

    Muy bueno lo de los voladores, jeje

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